En nuestro recorrido por la costa oeste irlandesa, realizando la ruta conocida como Wild Atlantic Way, nuestro punto de partida fue el condado de Donegal. Situado en el extremo noroeste de Irlanda, es este un condado de contrastes. Con desiertas playas de arena infinita, montañas escarpadas, grandes acantilados y parques naturales. La ciudad que le da nombre se encuentra en un valle rodeado por las montañas Bluestack y la bahía de Donegal. Es una ciudad pequeña pero coqueta, con un bonito centro histórico conocido como "el diamante" por su forma.
El edificio histórico más destacado de la ciudad de Donegal es su castillo. Fue construido en 1474 por Red Hugh O´Donnell. El edificio es de estilo jacobino y tiene planta rectangular. La fortaleza fue originariamente construida utilizando piedra caliza y arenisca. Pasó sus dos últimos siglos prácticamente en ruinas, hasta que fue reconstruido en los años 90 del pasado siglo. La muralla que lo protege data del siglo XVII.
Pequeña capilla junto al castillo. |
Dentro podemos encontrar una serie de estancias decoradas con muebles de la época. Destaca el salón noble con una espectacular chimenea. La entrada al castillo cuesta 5 euros por adulto y los menores de 12 años entran gratis. Con la entrada dan una hoja informativa en varios idiomas, entre ellos el español. Es uno de los edificios que entran en la Heritage Card, tarjeta que te permite visitar durante el plazo de un año muchos monumentos que forman parte del patrimonio de Irlanda.
También de interés histórico en la ciudad es la Abadía de Donegal, construida en la misma época del castillo y situada a orillas de la Bahía de Donegal. Hoy en día es un edificio en ruinas de gran belleza fotogénica por el antiguo cementerio que alberga y que con el marco incomparable de la bahía crea un cuadro espectacular.
La bahía de Donegal es un gran atractivo de esta ciudad, y desde ella parten rutas en Waterbus que la recorren en unos 75 minutos. El punto de salida de este barco se encuentra cerca de la oficina de turismo. Enfrente de esta oficina se encuentra también un gran aparcamiento público que es el mejor lugar para dejar el coche si se visita esta localidad.
Hay también en la localidad un pequeño museo dedicado al ferrocarril con algunas maquetas y la historia de cómo y hasta cuando llegó el ferrocarril a ella. A nosotros esta visita no nos resultó de gran interés.
El condado de Donegal tiene un gran atractivo turístico, conocido como el inicio de la ruta costera del oeste de Irlanda. Dentro de este se encuentra el Parque Nacional de Glenveagh. Este espacio natural se encuentra situado al norte del condado de Donegal, en el centro de las montañas Derryveagh. Tiene una extensión de 16.000 hectáreas, cuenta con un centro de visitantes desde el que se puede hacer un paseo en bus por el parque hasta llegar al castillo de Glenveagh. Este castillo se construyó en el siglo XIX. Ubicados cerca del castillo están los jardines Glenveagh con una gran colección de plantas de distintos países.
Foto cortesía de Ireland hidden´s gems. |
Otra de las principales atracciones del condado son los acantilados de Slive Liege, menos conocidos que los famosos acantilados de Moher, en el condado de Galway, y sin embargo más altos que estos. De hecho son los acantilados más altos de Europa.
Slive Leage. Ireland.com |
Mención aparte merecen las playas de esta comarca, son absolutamente increibles y un paraiso para los amantes del surf. El posible realizar avistamientos de delfines y otras especies marinas desde ellas, de hecho nosotros vimos una pareja de delfines desde la playa de Rossnowlagh, en la localidad de Ballyshannon.
Sin duda dentro de la comarca la localidad que más surferos atrae es Bundoran, conocido centro vacacional con multitud de pubs, restaurantes y centros de ocio donde se puede practicar este deporte en su espectacular playa de Tullan Strand.
Sin duda Donegal constituye el punto ideal para iniciar esta preciosa ruta por la costa irlandesa, nosotros proseguimos viaje y os animamos a acompañarnos en este en los siguientes artículos.
Sin duda Donegal constituye el punto ideal para iniciar esta preciosa ruta por la costa irlandesa, nosotros proseguimos viaje y os animamos a acompañarnos en este en los siguientes artículos.
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