CHATSWORTH. 23 de Julio de 2017.
Chatsworth House es una casa palacio localizada dentro del Peak District National Park en Derbyshire en el centro de Inglaterra, Reino Unido. La casa está abierta para visitas turísticas. Además del edificio principal se pueden visitar los jardines y la granja que está habilitada como una granja escuela donde los niños entran en contacto con los animales y aprenden por ejemplo como ordeñar una vaca o como se hace el queso. Nosotros realizamos esta visita acompañados por una amiga que reside en Leicester, a una hora aproximada de distancia en coche.
Breve reseña histórica.
El estado de Chatsworth fue adquirido por la familia Cavendish en 1549. Sir William Cavendish era un hombre importante dentro de la corte de Enrique VIII. En 1552 Sir William y su esposa Bess comenzaron a construir una ambiciosa casa alrededor de un patio central, con una torre, un gran salón y una capilla. En 1618 Willian, hijo de Bess, fué nombrado Earl of Devonshire. Pocas alteraciones se hicieron en la casa hasta el final del S.XVII, en 1686 el cuarto Earl de Devonshire reconstruyó el planta sur, añadió nuevas habitaciones en la primera planta y unas magníficas estancias destinadas a la visita de la nueva reina. En 1694 se creó el ducado de Devonshire. El duque realizó otras renovaciones en la casa que le dieron el aspecto que tiene actualmente.
En 1950 el decimoprimer duque y la duquesa Deborah, tuvieron que hacer frente a una gran carga fiscal por derechos de herencia, por lo que decidieron abrir la casa al público para aliviar dicha carga. La impulsora del proyecto fué la Duquesa Deborah, una mujer con una gran visión empresarial que supo convertir Chatsworth en la gran atracción turística que es hoy.
El entorno.
Chatsworth House se encuentra ubicada en Derbyshire, dentro del Peak District, un parque nacional británico de inmensa belleza, es una zona de campiña en la que podemos encontrar bellísimos pueblos con una amplia oferta de alojamiento. En nuestro caso la visita solo fue de un día, con el objeto exclusivo de visitar la casa, pero el recorrido atravesando pueblos y campiña nos dejó con ganas de conocer la zona más en profundidad.
La visita.
Nosotros fuimos un domingo en Julio, por lo que previendo una gran asistencia de público, reservamos las entradas en la página oficial la noche anterior. La reserva previa tiene la ventaja además de incluir parking gratuito, en este caso un parking entre ovejitas que pastaban totálmente ajenas a los turistas. La página web oficial de la casa es www.chatsworth.org. La página está en inglés pero es muy intuitiva y fácil de seguir, te da opción de comprar entradas para la casa, jardín y granja por separado o conjunta y tiene la opción de entrada familiar para dos adultos y tres niños que sale algo más económica. La entrada no es barata pero merece la pena la visita. Nosotros elegimos la entrada familiar porque aun siendo dos adultos y dos niños salía mejor que comprar las entradas sueltas.
Cuando llegamos el día estaba soleado aunque había algunas nubes, pero como había previsión de lluvia para la tarde decidimos visitar en primer lugar los jardines. Los jardines son una verdadera maravilla y son tan extensos que se necesita el mapa para orientarse dentro. A destacar por su belleza la cascada, el jardín de rocas y las numerosas fuentes. Dentro de los jardines hay un laberinto de arbustos que resulta muy entretenido para los niños. Nosotros pasamos un ratito en este intentando llegar al centro del laberinto y he de decir que no fué nada fácil pero sí muy divertido.
Después de los jardines nos fuimos a ver la zona de granja donde también hay una pequeña cafetería para tomar algo y una zona de juego para los niños. Cuando estábamos tomando unos sandwiches en la zona de juegos comenzó a lloviznear, nadie se inmutó, la gente siguió comiendo y jugando como si la lluvia no fuera con ellos. Le comenté a mi amiga que en España si empieza a llover todo el mundo echa a correr como si fuera lluvia ácida y me contestó que allí si hacen eso no salen nunca.
Tras la granja nos fuimos a realizar la visita a la casa, llegamos relajadamente a las cuatro de la tarde y para nuestra sorpresa este era el último pase, por los pelos llegamos, hubiera sido un chasco no poder entrar así que os aconsejo estar más atentos que nosotros a la hora de cierre. A pesar de ser el último pase, pudimos hacer la visita con total tranquilidad, y menos gente. Se tardan unas dos horas en la visita. Dentro hay información en varios idiomas, incluido el español, sobre la decoración y moviliario de la casa. Actualmente dentro hay una exposición de la moda a través de los siglos y la familia Cavendish, propietarios de la casa desde su origen.
Cuando llegamos el día estaba soleado aunque había algunas nubes, pero como había previsión de lluvia para la tarde decidimos visitar en primer lugar los jardines. Los jardines son una verdadera maravilla y son tan extensos que se necesita el mapa para orientarse dentro. A destacar por su belleza la cascada, el jardín de rocas y las numerosas fuentes. Dentro de los jardines hay un laberinto de arbustos que resulta muy entretenido para los niños. Nosotros pasamos un ratito en este intentando llegar al centro del laberinto y he de decir que no fué nada fácil pero sí muy divertido.
Después de los jardines nos fuimos a ver la zona de granja donde también hay una pequeña cafetería para tomar algo y una zona de juego para los niños. Cuando estábamos tomando unos sandwiches en la zona de juegos comenzó a lloviznear, nadie se inmutó, la gente siguió comiendo y jugando como si la lluvia no fuera con ellos. Le comenté a mi amiga que en España si empieza a llover todo el mundo echa a correr como si fuera lluvia ácida y me contestó que allí si hacen eso no salen nunca.
Tras la granja nos fuimos a realizar la visita a la casa, llegamos relajadamente a las cuatro de la tarde y para nuestra sorpresa este era el último pase, por los pelos llegamos, hubiera sido un chasco no poder entrar así que os aconsejo estar más atentos que nosotros a la hora de cierre. A pesar de ser el último pase, pudimos hacer la visita con total tranquilidad, y menos gente. Se tardan unas dos horas en la visita. Dentro hay información en varios idiomas, incluido el español, sobre la decoración y moviliario de la casa. Actualmente dentro hay una exposición de la moda a través de los siglos y la familia Cavendish, propietarios de la casa desde su origen.
Chatsworth House es un lugar muy visitado, parte de su fama se debe a ser el escenario de la película Orgullo y Prejuicio (2005), pero no es la única película que utilizó ese magnífico escenario, también está aquí rodada "la duquesa (2008) y parcialmente rodado aquí fue " El hombre lobo"(2010) con Benicio del Toro y Anthony Hopkins.
Los jardines.
Los jardines se extienden por una zona de 100 acres y son producto de una labor de cuidado y jardinería desarrollada durante 500 años.
La casa.
Chatsworth alberga una magnífica colección de objetos, muebles y obras de arte pertenecientes a la familia Cavendish.
Además de los varios sitios para comprar sandwiches y bebidas que hay en el recinto, las antiguas caballerizas se han convertido en restaurante.
Antiguas caballerizas. |
Chatsworth House es una casa de película en un entorno privilegiado, lamentablemente no disponíamos de tiempo suficiente para explorar los pueblos de alrededor, pero sin duda es una opción futura, dada la belleza del lugar.
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