Londres.South Kensington.

16 de Julio de 2017.

Este fue el primer día  de nuestro viaje a Londres. Comenzamos aquí porque era la zona donde teníamos el hotel.

Volamos a Londres con Ryanair, por lo que llegamos al aeropuerto de Stanted que está a una hora aproximadamente en coche de Londres. Tras valorar diversas opciones para el traslado al hotel, al final me decidí por contratar un transfer privado. La compañía elegida fue www.blackberrycars.com ,de nuevo me orienté por las opiniones de otros viajeros, era la que ofrecía del servicio más económico y con mejores opiniones. Contratando a través de su página tenían un 10% de descuento, con lo que al final el viaje privado para cuatro desde el aeropuerto al hotel nos costó 61 libras, el pago es al realizar el servicio, otra ventaja a mi entender.

En la página recomiendan contratar el viaje para media hora tras la llegada. Nuestro vuelo aterrizó a las 12 hora británica por lo que seguí las recomendaciones. A pesar de esta precaución no tuve en cuenta que Reino Unido, a pesar de estar aún en la unión europea, no firmó el libre tránsito de personas por lo que hay que pasar un control de aduana que te llevará al menos unos 40 minutos. A pesar del retraso el conductor nos esperó pacientemente, sin cargo adicional y fue muy amable en todo momento.

Llegamos al hotel, en este caso la cadena elegida fue www.premierinn.es y el hotel el Premier Inn London Kensington Olympia. El hotel está a cinco minutos andando de la estación de metro de Earl Court, de donde salen las lineas Piccadilly y District. También está a 15 minutos andando del museo de historia natural y del museo de la ciencia. Cogimos una habitación familiar con desayuno incluido.

Dada la hora comimos unos sandwiches de forma rápida para que nos diera tiempo a visitar el museo de historia natural ya que los museos de Londres cierran a las seis de la tarde ,excepto los viernes que lo hacen a las ocho y media de la tarde. Llegamos al museo sobre las cuatro y a pesar de ser domingo por la tarde no había mucha cola, unos quince minutos y estuvimos dentro. Este museo es gratuito, al igual que todos los museos públicos de Londres, y muy popular entre los británicos por lo que los fines de semana suele tener bastante cola.

El edificio del museo es de estilo neorrománico, bastante impresionante, y esta impresión continua al entrar en el gran vestíbulo en el que hay un esqueleto de ballena colgado del techo. Antes recibía a los visitantes un esqueleto de diplodocus, pero al reestructurar la zona de dinosaurios lo han sustituido por la ballena.

El museo es bastante amplio por lo que os recomiendo compréis un mapa. Nosotros visitamos la zona de los dinosaurios y la zona de los minerales, y luego paseamos por las otras salas. A mi entender el museo tiene una organización un poco anárquica, está organizado por colecciones que algunas veces son un poco heterogéneas.

Por último fuimos a la parte dedicada al planeta Tierra, donde hay incluso un escenario donde se reproduce un terremoto.

Salimos del museo sobre las seis de la tarde con lo cual nos fue imposible visitar el museo de la ciencia como hubiera sido nuestro deseo. Decidimos subir por Exhibition Road hacia Hyde Park y dar un paseo por el parque. Antes de llegar al parque nos encontramos con el edificio del Royal Albert Hall. Este magnífico teatro, inaugurado en 1871, fue construido inspirándose en los antiguos anfiteatros, de ahí su forma esférica. La influencia clásica se puede apreciar también en la decoración de su fachada.

Después de rodear el edificio, entramos en Kensington Gardens por la puerta donde se encuentra el Albert Memorial, un monumento en forma de templete dorado en recuerdo de Alberto de Sajonia, esposo de la reina Victoria.

Kensington Gardens es contiguo  a Hyde Park, hay quien lo considera parte de este,  entre los dos forman un gran área verde en el corazón de Londres. Dentro de Kensington Gardens encontramos el Palacio de Kensington, residencia de la princesa Diana de Gales desde su divorcio hasta su trágica muerte en accidente de coche.

También hay un pequeño lago, bastante más pequeño que el lago Serpentine que separa Hyde Park de Kensington Gardens. Además del Palacio de Kensington, las zonas más destacadas en ambos parques son los jardines italianos, la estatua de Peter Pan, el lago Serpentine y speaker corner, una zona donde se permite hablar en público y que está situada en el extremo noroeste de Hyde Park.

Al salir de Hyde Park decidimos bajar por Exhibition Road de nuevo para buscar un sitio para cenar. Lo hicimos en Pierino Pizza, un restaurante italiano del que había leido buenos comentarios y que no nos decepcionó.

Seguimos paseando por la zona de South Kensington ya en dirección al hotel para descansar y prepararnos para nuestro siguiente día en Londres.